Los corales del Mar Rojo resistirán la prueba del tiempo

A pesar del calentamiento de las temperaturas y de las prácticas humanas destructivas, el Mar Rojo podría mantener su robusta población de corales en el norte durante otros 100 o 150 años, según una nueva investigación publicada en Global Change Biology1.

KAUST

Científicos de la Universidad Rey Abdullah de Ciencia y Tecnología (KAUST), de Arabia Saudí, de la Universidad de Essex, del Reino Unido, y de la Universidad Al-Azhar, de Egipto, creen que la parte norte del Mar Rojo y su tramo de 1.800 kilómetros de costa podrían convertirse en uno de los mayores refugios de coral del mundo. 

«Todos los corales situados al norte del paralelo 24 norte en el Mar Rojo están muy por debajo de su umbral de temperatura térmica», explica Christian Voolstra, coautor del estudio y biólogo marino de la KAUST. 

Los científicos habían señalado anteriormente el Golfo de Aqaba como refugio para los corales, pero este estudio amplía el ámbito geográfico del refugio de forma espectacular. «No estamos hablando de pequeñas bolsas de corales sanos», dice Voolstra, «estamos hablando de unos 2000 km de costa».

La zona norte del Mar Rojo es donde la temperatura superficial del agua es más fría, y aunque existen corales tolerantes al calor en todo el Mar Rojo, la población situada más al sur está alarmantemente cerca del punto de inflexión. «La decoloración suele producirse a partir de 1°C por encima de la temperatura media del verano», dice Voolstra. Pero en las aguas más frías del norte, los corales gozan de un margen de 5°C. 

Para llegar a estas conclusiones, los científicos investigaron primero los patrones de sensibilidad térmica de los corales en relación con las temperaturas ambientales en todo el Mar Rojo, además de recopilar un conjunto de datos sobre el blanqueamiento del coral desde 1982 para identificar las zonas clave menos susceptibles al estrés térmico. 

Contrastaron los historiales térmicos de Hurghada, en Egipto, y de Thuwal, en Arabia Saudí, con sus respectivos patrones de blanqueo, y al observar los impactos de los eventos de El Niño de 2015-2016 en los corales de ambas zonas, concluyeron que la susceptibilidad de los corales del norte a los picos de temperatura del agua era mucho menor en el Mar Rojo. 

«Esta anomalía, que solo se da en el Mar Rojo, nos da una oportunidad para actuar», afirma. Añade que las soluciones locales, así como la colaboración entre Egipto, Jordania, Israel y Arabia Saudí son necesarias para proteger este ecosistema único. 

Proyectos

Además de las amenazas derivadas de la contaminación y el desarrollo costero, los proyectos de infraestructuras, como el puente previsto para unir Arabia Saudí con Egipto, podrían alterar aún más este ecosistema. 

Ameer Abdulla, investigador principal del Centro de Ciencias de la Biodiversidad y la Conservación de la Universidad de Queensland (Australia), que no participó en el estudio, cree que estos resultados refuerzan la importancia mundial de la conservación de esta zona como, según él, un banco de semillas genético regional. 

«Sin embargo, la capacidad de recuperación de los corales estará muy influenciada por las condiciones externas locales, como la oceanografía y el impacto humano», afirma Abdulla. 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *